Las pruebas de ADN confirman la paternidad del monstruo austríaco

Ya es oficial. Josef Fritzl, el monstruo de Amstetten que encerró a su hija durante 24 años para utilizarla como esclava sexual, es el padre de los seis hijos que dio a luz esta. Las pruebas de ADN, cuyos resultados fueron dados a conocer ayer, demostraron científicamente la paternidad de Fritzl, una prueba irrefutable que servirá a la Fiscalía para acusarlo de haber cometido los delitos de abuso sexual y violación.
«Los resultados demuestran que los seis hijos de Elisabeth Fritzl nacidos en cautiverio han sido procreados por su propio padre», señaló Franz Polter, responsable de la oficina contra el delito de Baja Austria. «Pero hay un millón de interrogantes que no tienen respuesta», añadió.
Polter admitió que la policía había registrado otras propiedades del ingeniero electrónico para descartar la existencia de otras víctimas en el pueblo. En el curso de los años, Fritzl ha logrado acumular una fortuna evaluada en dos millones de euros y poseía otras cinco propiedades. «Las cinco viviendas han sido registradas y el resultado fue negativo», agregó Polter.
Los responsables de la investigación y la Fiscalía señalaron ayer que Fritlz podría ser acusado de haber cometido varios delitos, entre ellos, homicidio por omisión, violación, abusos sexuales y privación de la libertad. Si es encontrado culpable, podría ser condenado a pasar el resto de su vida en la cárcel.
Después de haber ofrecido una confesión parcial, las autoridades anunciaron que el acusado fue puesto a disposición de una juez en St. Pöllten, la capital provincial de Baja Austria. Después de negarse a declarar, la letrada decretó la prisión preventiva, que según la ley será de un período inicial de 14 días. El portavoz de la fiscalía admitió que las víctimas no han sido interrogadas a causa del precario estado psicológico. «Partimos del hecho de que todo el proceso durará varios meses», dijo.
Los responsables de la investigación descartaron que la esposa del ingeniero estuviera involucrada en el martirio de su hija y señalaron que habían interrogado a los seis hermanos de Elisabeth. Todos admitieron que nunca habían notado algo sospechoso durante sus visitas al hogar de sus padres.
Y es que hay gente peor que Pinhead...